Marruecos, a
principios del siglo XIX, era un país totalmente agrario, sin ningún tipo de
tecnología, aislado, empobrecido y debilitado, lo que llevó al país a la
necesidad de aumentar la población para aumentar así la producción. Llegando a
crear políticas como: A mayor número de miembros de una familia mayor
importancia y prestigio social y más poder político en suma. Pero esto no tuvo
mucho éxito ya que aumentaron las epidemias como la peste, el cólera, tifus, disentería o viruela y por otro lado hambrunas, lo que hizo
descender la población a 3 millones de personas. Todo esto explica la continua
crisis económica que sufría la sociedad marroquí y la inestabilidad
sociopolítica. Las llanuras, principal potencial agrario, se verán
especialmente afectadas por todas las enfermedades, lo que llevó al retraso e
insuficiente explotación de sus tierras debido a la falta de mano de obra.
Mapa de Marruecos. Original aquí |
La situación de Marruecos llevó a que Gran Bretaña, Alemania, España y Francia quisieran conquistarle pero finalmente
se repartieron el país entre España y Francia. Todo el sistema se
vio perturbado con la penetración de Europa en el sistema monetario al
introducir el escudo francés y el duro español.
Comenzará a ser importante la demanda de lana marroquí. De modo
especial Marruecos empezará a convertirse en un mercado
de tejidos de algodón procedentes de las fábricas europeas. Además Marruecos se convertirá en la puerta del África negra a través de las rutas caravaneras.
Por otro lado Gibraltar desempeñará un papel importante en esta
dinámica comercial: será un centro intermediario de comercio realizado por
judíos marroquíes en nombre del Sultán, con lo que el enclave británico se
convierte en centro de redistribución de productos: lana hacia Marsella, tejidos de algodón
ingleses hacia Marruecos.
Durante esta época España ataca a las fuerzas marroquíes que llevaron a la toma de Tetuán en 1860 que tuvo como consecuencia el tratado de Wad-Ras.
Para Francia el control de Marruecos significaba la seguridad de su colonia
argelina y la posible expansión de su comercio, mientras que para España controlar Marruecos significaba sobre todo asegurar sus
territorios de Ceuta y Melilla.
Las continuas presiones de las potencias europeas provocarán en Marruecos una grave crisis que afectará en todos los aspectos a este y que desembocará en el establecimiento de los protectorados francés y español.
La ocupación española se vio marcada
por la revuelta de 1920 dirigida por Abd el Krim cuyos guerreros derrotaron al ejército
español de 60.000 hombres. Finalmente fué derrotado por un ejército conjunto,
español y francés, al mando de Philippe Pétain
|
Marruecos recuperó su independencia política de Francia y de España el día 2 de marzo de 1956; y el día 7 de abril del mismo año Francia abandonó oficialmente su protectorado en Marruecos el cual constituyó una monarquía constitucional y de derecho divino al mismo tiempo. Posteriormente se creó un código de libertades públicas y se formó un gobierno de coalición nacional y por último un banco popular.
Por último decir que ofrece oportunidades de negocio
significativas a las empresas españolas derivadas no sólo de la cercanía
geográfica y complementariedad de las economías, sino también de las sucesivas
rebajas arancelarias.
Toda esta historia es digna de tener en cuenta ya que es uno de
los pocos países que conseguido integrarse un poco en el mercado global cosa
que no todos sus vecinos han podido conseguir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario